Cuando no había Twitter

Cuando no había Twitter

Cuando no había Twitter, pero hace mucho, mucho, mucho, lo que era digno de admiración era lo que llamaban ser «un hombre del Renacimiento». O sea, dedicarse y dominar, todas (o muchas) materias a la vez.

Ahora, eso ha cambiado y se dice que es la fórmula más segura para el fracaso. La civilización duplica sus conocimientos cada pocos años y es tal el volumen que resulta imposible abarcarlos. Ahora triunfa la especialización. El éxito le puede llegar al médico que sabe absolutamente todo de la segunda uña del pie izquierdo, aunque no tenga ni idea del resto del cuerpo. Hay que especializarse en algo.

¡Pues no!

Y mira, va a ser que no. Mis intereses han sido en mi vida múltiples y variados. He estudiado y practicado mil cosas diferentes y no me arrepiento en absoluto. Esta web en la que estás leyendo, está condenada al fracaso, porque toca todos los palos que me gustan, y pueden ser fotografía, dibujo, historia, astronomía, astrología (sí, astrología), humor, costumbrismo, y cualquier cosa que me pase por la cabeza. ¿Y a quién le puede interesar todas esas cosas a la vez? Pues a mí. O a algún doble que tenga por ahí, al cual me gustaría mucho conocer.

Pero tengo la suerte de que la hago porque me gusta, porque aprendo, porque me divierte y me relaja. La hago para evadirme de otras cosas que sí que necesito hacer para comer y para vivir. Esto es solamente un divertimento, no tengo jefe y no tengo que dar cuentas a nadie. ¡Qué felicidad!

En mis cuentas de Twitter o Facebook me ocurre igual, me ocupo de muchos asuntos diferentes, y lo hago cuando puedo, cuando me apetece. Hoy puedo estar hablando de perros, una de mis aficiones, mañana puedo estar indignándome con los chorizos y corruptos, y al otro estar diciendo tonterías supuestamente humorísticas porque, eso sí, el humor que no me falte. Es una constante en mis aficiones. Sea escrito, hablado, dibujado, cinematografiado,… quiero reírme. De mí y del mundo.

Antes lo hacía, entre otras vías, por la radio. Y alternaba escribir guiones de humor para la Cadena SER con realizar programas serios sobre yoga, sobre curiosidades del habla, sobre OVNIS (aunque eso fue antes de la SER, en RNE, cuando se llamaba Radiocadena, y antes de eso Radio Juventud.

Anticuaudio

Volviendo al humor, lo que hago ahora a veces en Twitter, antes lo hacía en radio. Y por casualidad he encontrado una cinta con muchos guiones del año 1982, nada menos, cuando el mundial de fútbol que se celebró en España y Naranjito, aquella mascota horrorosa que hoy se ve hasta con ternura. He recuperado dos o tres de aquellos cortos programas y los he colgado aquí. Muchas cosas ya no se entienden porque han quedado fuera de contexto con el paso de los años, lo que fue actualidad hoy es pasado y olvido. Pero todavía queda algo. Desempolvando viejas cosas…

 

Comments

No comments yet. Why don’t you start the discussion?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.